La odontopediatría es una parte de la odontología que se encarga del cuidado y mantenimiento de la salud oral del niño de una forma integral.
Partimos de la situación de poder prevenir la enfermedad oral desde el embarazo de la madre, siguiendo las diferentes etapas de desarrollo y crecimiento del niño hasta completar la madurez del ser humano (alrededor de los 18 años).
Otro hecho importante reside en que una de las particularidades de esta especialidad es la de profundizar en el control del comportamiento del paciente infantil y juvenil en el consultorio. Este hecho es fundamental, en primer lugar para realizar los tratamientos con rapidez y eficacia, lo que finalmente procurará que se adquieran hábitos correctos tanto de higiene bucal como de dieta y que se deposite plena confianza en la odontología
Afortunadamente, nuestra consulta esta adaptada a las necesidades del niño (con juguetes, libros infantiles, premios al finalizar las visitas, etc). El odontopediatra sabe aplicar las técnicas adecuadas para ayudar al niño a familiarizarse con las consultas dentales y sus tratamientos. Iniciar las visitas cuando el niño es pequeño le ayuda a tomar contacto con este ambiente, y sobre todo, teniendo en cuenta que la implantación de medidas preventivas (limpieza dentaria, aplicación tópica de flúor) no son molestas, lo cual repercute en una sensación agradable y, desde luego, de motivación positiva hacia la siguiente visita de control. Si en algún caso fuese necesario el tratamiento dental con anestesia, el odontopediatra conoce las técnicas adecuadas para que este procedimiento resulte prácticamente indoloro, realizando posteriormente el tratamiento previsto y quedando igualmente una sensación de motivación positiva para sucesivas visitas.